Mientras descansábamos como bellos durmientes en un otoño aún insipiente, alguien me susurró anoche en un sueño:
‘No somos físicos sino ópticos. Somos pura ilusión en la cual no hacemos más que mirarnos a nosotros mismos en el espejo de los otros. El día que atravesemos el espejo nos Veremos y convertiremos en Reales’.
Y entonces Alicia atravesó el espejo.
Sí y lo mejor es que no tenemos que hacer nada, sólo permitir que suceda.