El cuerpo humano, mientras lo aliente la vida, es un organismo complejo, misterioso, que posee la salud.
Estar vivo es estar sano, física y mentalmente.
Podemos tener enfermedades, actitudes psicóticas, pero por muy graves que sean no nos convierten en un ‘enfermo’ o en un ‘loco’, no definen nuestro ser sino nuestro estado presente.
El espiritu humano, infinito, no soporta etiquetas.