Entre la noche de La Fuerza y el día de El Colgado: hice un click. Primero, con la palabra ‘valiente’ del mensaje recibido sentí la aceptación. Luego, lo que pasó en sueños. Después, oir la frase justa en el momento exacto.
Se me ocurrió ir al parque. Los parque están llenos de gentes felices. ‘Cómo no vengo más a menudo’, me pregunté. La playa. L’Hangar. La familia de artistas. La bici. La amiga. Las maletas. El hotel. Y el polvo. El Tarot. La nueva vida.